Lisboa es una de las ciudades más bonitas de Europa y sin embargo es bastante desconocida por muchos. Además, puede visitarse durante todo el año gracias a sus temperaturas templadas, y al no ser excesivamente grande y tener un centro histórico bastante compacto, es perfecta como destino de un crucero, ya que se puede visitar en poco tiempo y aun así apreciar su belleza y su encanto único.
Si haces un crucero por el Atlántico y Lisboa se encuentra en una de tus paradas, hoy en Solocruceros queremos que aproveches al máximo tu paso por esta bonita ciudad y descubras aquellos rincones que realmente merecen la pena.
Si tenemos uno o dos días para visitar Lisboa lo mejor será centrarnos en el Centro Histórico y el barrio de Belém, dos de las zonas más famosas y a la vez más características de la ciudad.
En el centro histórico encontramos diferentes barrios como la Baixa, el laberinto de callejuelas de Alafama o Barrio Alto, famoso por su vibrante vida nocturna.
En la Baixa se encuentran algunas de las tiendas y cafés más originales e interesantes de la ciudad, una buena opción para relajarse un rato y disfrutar del ambiente. Te recomendamos que visites la Praça do Comércio, la plaza de referencia de Lisboa, y más tarde la Catedral da “Sé” o el mirador de Santa Luzia. Todos son escenarios increíbles que no debes perderte.
El siguiente paso es visitar la Alafama, la zona más histórica y célebre de toda la ciudad, un barrio perfecto para pasear y perderse por sus maravillosas calles. En cada esquina se encuentra un pedacito de historia y se aprecia ese encanto único. Es increíble cómo puedes llegar a conocer una ciudad adentrándote por sus calles y descubriendo los rincones más insólitos, así que déjate llevar por tu instinto y recorre este curioso barrio.
Si visitas Barrio Alto, aprovecha para fotografiar la ciudad desde los increíbles miradores que se encuentran en la zona. Además, puedes aprovechar para descubrir la gran cantidad de restaurantes, locales, galerías de arte y tiendas de diseño que se encuentran.
Si aún sobra algo de tiempo, es muy recomendable visitar el barrio de Belém, donde se encuentran monumentos históricos y de gran interés como el Monasterio de los Jerónimos y la Torre de Belém, ambos característicos de la arquitectura gótica manuelina de Portugal y clasificadas por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad.